lunes, 17 de agosto de 2009

Domingo Savio "Patrono de las Embarazadas y de las Cunas"

Estando Domingo en el Oratorio en Turín, le pide a Don Bosco que le deje ir a ver a su madre que estaba enferma. Nadie sabía de esa enfermedad, pero ante la insistencia de Domingo, lo deja ir. La mamá estaba luchando por dar a luz un nuevo hijo y corría peligro su vida. Domingo entra, la abraza, la besa y deja sobre el pecho de ella un escapulario de la Virgen María. Regresa después al oratorio y le agradece a Don Bosco el permiso y le dice que su madre está bien. La mamá pudo dar a luz sin ningún problema a su bebé. Todos vieron el milagro y ella misma prestaba el escapulario a otras mujeres que tenían dificultades con el embarazo. Fueron muchas las gracias concedidas con aquel milagroso escapulario.


Oración

Santo Domingo Savio, que en la escuela de Don Bosco aprendiste a recorrer los caminos de la santidad juvenil: enséñanos a imitar tu amor a Jesús y a María, y tu ansia de llevar a tus compañeros a ser sus amigos; alcánzanos del Señor que, practicando tu lema " Antes morir que pecar" podamos conseguir nuestra salvación eterna. Amén